EL SISTEMA DEL CODEX: LA FAO, LA OMS Y LA COMISIÓN DEL CODEX ALIMENTARIUS
El establecimiento de la Comisión del Codex
Alimentarius obedeció a una necesidad.
Sus Estatutos y su Reglamento, cuidadosamente elaborados, le permiten perseguir
sus objetivos claramente definidos de manera disciplinada, desapasionada y científica.
LA COMISIÓN
El 11º período de sesiones de la Conferencia de la FAO en 1961 y la 16ª Asamblea Mundial de la Salud en 1963 aprobaron sendas resoluciones por las que se establecía la Comisión del Codex Alimentarius. Los dos órganos adoptaron también los Estatutos y el Reglamento de la Comisión.
Los Estatutos constituyen el fundamento jurídico de la labor de la Comisión y en ellos se recogen oficialmente los conceptos en que se basa y las razones de su creación. En el Artículo 1 de los Estatutos se enuncian los fines, funciones y objetivos de la Comisión. En el Artículo 2 se definen las condiciones para adquirir la condición de miembro de la Comisión, de la cual pueden formar parte todos los Estados Miembros y Miembros Asociados de la FAO y de la OMS. En 1988 la Comisión estaba integrada por 163 países, que representaban el 97 por ciento de la población mundial.
En el Reglamento de la Comisión se describen y configuran los procedimientos de trabajo
apropiados para un organismo interguberna-mental, dándoles carácter oficial. En ellos se estipulan:
las condiciones para formar parte de la Comisión;
el nombramiento de la Mesa de la Comisión, que incluye el presidente, tres vicepresidentes, coordinadores regionales y un secretario, cuyas funciones se indican;
el establecimiento de un comité ejecutivo que se reúne entre los períodos de sesiones de la Comisión y actúa en nombre de ésta como su órgano ejecutivo;
la frecuencia y el desarrollo de los períodos de sesiones;
el carácter del programa de los períodos de sesiones de la Comisión;
los procedimientos de votación;
los observadores;
la preparación de actas e informes de la Comisión;
el establecimiento de órganos auxiliares;
los procedimientos que han de aplicarse para la elaboración de normas;
la distribución del presupuesto y las estimaciones de los gastos;
los idiomas que ha de utilizar la Comisión.
Representación. La Comisión es un órgano realmente internacional. Desde su creación, ha celebrado 22 períodos de sesiones, con presidentes de Alemania, Canadá, los Estados Unidos, Francia, Hungría, Indonesia, México, los Países Bajos, el Reino Unido, Suiza y Tailandia. Se han elegido vicepresidentes de Australia, Canadá, Costa Rica, Dinamarca, los Estados Unidos, Francia, Ghana, Hungría, Indonesia, Iraq, Kenya, México, Nigeria, Noruega, Nueva Zelandia, los Países Bajos, Polonia, el Reino Unido, Senegal, Sudán, Suiza y Tailandia.
Los Gobiernos de Alemania, Argentina, Australia, Brasil, Camerún, Canadá, Cuba, la ex Checoslovaquia, los Estados Unidos, Francia, Ghana, India, Kenya, Malasia, Nueva Zelandia, los Países Bajos, Polonia, el Reino Unido, la República de Corea, Senegal, Tailandia, Túnez y la ex Unión Soviética han aportado representantes regionales a la Comisión.
La Comisión se reúne cada dos años, alternativamente en la Sede de la FAO en Roma y en la Sede de la OMS en Ginebra. A las sesiones plenarias asisten hasta 500 personas. La representación en los períodos de sesiones se efectúa a nivel de país. Las delegaciones nacionales están encabezadas por oficiales superiores designados por sus gobiernos. Las delegaciones pueden incluir, y de hecho incluyen a menudo, representantes de la industria, de organizaciones de consumidores y de instituciones académicas. Los países que no son todavía miembros de la Comisión asisten en ocasiones en calidad de observadores.
Varias organizaciones gubernamentales y ONG internacionales asisten también como observadores. Aunque son observadores, es tradición que la Comisión del Codex Alimentarius les permita exponer sus puntos de vista en todas las etapas salvo en la decisión final, que es prerrogativa exclusiva de los Estados Miembros.
Para facilitar un contacto permanente con los Estados Miembros, la Comisión, en colaboración con los gobiernos nacionales, ha establecido Puntos de Contacto del Codex en los países y muchos Estados Miembros tienen Comités Nacionales del Codex para coordinar las actividades a nivel nacional.
El interés por las actividades del Codex Alimentarius ha aumentado constantemente desde que se creó la Comisión, y la participación creciente de países en desarrollo en su labor es una prueba clara de los progresos realizados, a la vez que una demostración de la visión de futuro de los fundadores de la Comisión.