Tradicionalmente
la recolección del grano de los cereales se realizaba manualmente por grupos
de segadores que se trasladaban de unas regiones a otras con utensilios muy
rudimentarios. Estas labores manuales consistían en el segado del cereal con
ayuda de hoces, agavillado o amontonado de la paja en pequeños bloques, y el
atado y transporte en carretas hasta la era. Una vez allí, se realizaba la
trilla, para separar el grano de la paja, con ayuda de los tradicionales
ruellos o molas de piedra tirados por una caballería.
Con
el tiempo cada una de estas operaciones se ha ido mecanizando. Las primeras
máquinas que aparecieron fueron las guadañadoras en 1834, más tarde
aparecieron las primeras segadoras-agavilladoras, que segaban y dejaban la
mies en montones, sin atar, sobre el suelo. Luego, aparecieron las
aventadoras, las segadoras-atadoras y las trilladoras estáticas. Pero no es
hasta 1890 cuando aparecen las primeras cosechadoras. Estas máquinas
complejas realizan las labores de siega, trilla, separación y limpieza del
grano por sí solas. Al principio se trataban de máquinas accionadas con
motores de vapor o arrastradas por animales de tiro. En 1938 aparece en los
Estados Unidos la primera cosechadora integral autopropulsada con motores de
gasolina.
Se
pueden distinguir dos tipos de cosechadoras:
-
Cosechadoras
autopropulsadas. Son las más extendidas en la actualidad.
-
Cosechadoras
de arrastre. Dentro de ellas tenemos las accionadas por la toma de fuerza
del tractor y las que lo son mediante un motor auxiliar.
En
la actualidad son muchos los modelos y marcas de cosechadoras de cereales que
existen en el mercado, compuestas generalmente por elementos muy similares,
que varían poco de un fabricante a otro. En los últimos años se
experimentado una importante evolución en el mundo de las cosechadoras,
adaptándose correctamente a las condiciones y características de
recolección de un amplio abanico de cultivos.
Entre
los cultivos que se recogen con este tipo de maquinaria destacan los cereales
(trigo, cebada, avena, centeno, maíz, sorgo, arroz, etc.), otros tipos de
granos oleaginosos como girasol, colza, soja, cártamo, así como las
leguminosas para grano (lentejas, yeros, porotos, arvejas, garbanzos, etc.).
Destaca
la aparición de cosechadoras que adaptan su plataforma de corte a las
irregularidades y desniveles del terreno, la instalación de un sistema
inversor en el sinfín que elimina los atascos de material a la entrada del
alimentador, los sistemas de nivelación automática de la cosechadora cuando
se encuentra trabajando en laderas inclinadas, los sistemas de limpia de
cilindros de flujo axial, así como la instalación de todo tipo de sensores
de control y mandos de accionamiento que facilitan y hacen más cómoda la
tarea del operario.
De
forma resumida podemos decir que una cosechadora realiza las siguientes
operaciones:
1.
El molinete empuja los tallos de las plantas contra la barra de siega.
2.
La barra de siega corta los tallos y deja las partes aéreas de las plantas
sobre la plataforma contra el conductor transversal.
3.
El conductor transversal conduce el material cortado hacia la parte central de
la plataforma, donde se encuentra el conductor de alimentación.
4.
El conductor de alimentación conduce el material hacia el mecanismo de trilla
para su trillado.
5.
La paja se separa de los granos mediante el llamado sacapajas de la unidad de
separación y limpieza. La paja sale detrás de la máquina.
6.
El mecanismo de limpieza de la unidad de separación y limpieza separa la
pajilla y demás impurezas de los granos.
7.
Los granos son conducidos al tanque.