En invernadero, generalmente no es necesario
estercolar, ya que se trata de un cultivo secundario poco exigente en materia
orgánica. Así mismo, los requerimientos en elementos mineralesson relativamente bajos.
El abonado de fondo, puede realizarse a razón de 25
g/m2 de complejo 8-15-15.
En cobertera, cuando el sistema de riego es por
gravedad, es común el aporte de nitrógeno a razón de 2 g/M2, sin
que el total rebase los 10 g/m2.
En fertirrigación, en suelo enarenado y cultivo de
otoño-invierno, puede llevarse a cabo la siguiente programación:
-
Aplicar una abonado de fondo, siempre que sea necesario, del mismo
modo a como se explica para el riego por gravedad y unos 15 días antes de la
siembra, regando abundantemente a continuación.
-
Volver a regar abundantemente sin abono unos días antes de la
siembra.
-
Después de la nascencia, interrumpir los riegos durante un período
aproximado de 10 días.
-
Posteriormente, regar tres veces por semana durante un mes,
aplicando las siguientes cantidades de abono en cada riego:
0,15 g/m2 de
nitrógeno (N).
0,10 g/m2 de
anhídrido fosfórico (P2O5).
0,10 g/m2 de
óxido de potasio (K2O).
0,05 g/m2 de
óxido de magnesio (MgO), con bajos niveles de este elemento en el suelo.
-
Durante el siguiente mes, aplicar tres riegos semanales, aportando
las siguientes cantidades de abono en cada riego:
0,20 g/m2 de
nitrógeno (N).
0,10 g/m2 de
óxido de potasio (K2O).
-A continuación, y hasta el final del cultivo, regar en días alternos,
aportando nitrógeno a razón de aproximadamente 0,25 g/m2.