Para un huerto
permanente los árboles se espacian 12 m. Las zonas sombreadas por otros
árboles no permiten la producción de fruta. Para una productividad máxima,
la exposición al sol debe ser completa por todos los lados del árbol.
Durante los primeros años el marco de plantación más habitual es de 12 x 6
m, con una densidad de 134 árboles/ha, pero a partir del 15º año, la
plantación se distribuye a un marco de 12 x l2 m.
Aunque el litchi tiene un requisito de agua alto, no
soporta la inundación ya que el agua estancada induce la putrefacción de la
raíz. La capa freática debe estar por lo menos de 1.2 a 1.8 m por debajo de la superficie. No crecerá bajo las condiciones salinas.
A menudo la planta
de litchi se pone en los bancos de estanques y arroyos. En tierras bajas y húmedas,
en regueras de 3-4.5 m ancho y 9-12 m de largo, usando la tierra excavada para formar camas levantadas
para obtener un desagüe perfecto y la tierra esté siempre húmeda.
El litchi
requiere aplicaciones fuertes de fertilizantes, especialmente nitratos, para
la producción comercial y cuando crece en suelos alcalinos, se deben aplicar
como aspersiones nutritivas cantidades suplementarias de elementos
micronutrientes o como fertilizantes al suelo.
Los árboles jóvenes tienden a crecer
despacio y deben recibir aplicaciones sólo ligeras de un fertilizante completo. Los árboles maduros son más pesados y deben fertilizarse regularmente de primavera
a verano. Se recomienda el empleo de fertilizantes formulados para las plantas
propias de medios ácidos.
El uso excesivo de nitrógeno suprime
el crecimiento e interfiere la captación de otros nutrientes. La deficiencia de cinc es evidenciada
por un bronceando de las hojas y puede corregirse mediante aplicación foliar
de 3.5 kg de sulfato de cinc y 1.8 kg de cal hidratada en 45 litros de agua.
Es
una de las principales plagas que afectan al follaje del litchi. Está provocada
por Aceria litchii y provoca ampollas espesas y arrugas en la parte
superior de las hojas, torciéndolas y bronceándolas.
8.1.2. Chinches.
El enemigo más destructivo del litchi es la chiche con marcas rojas brillantes Tessaratoma
papillosa. Chupa la savia de las ramitas jóvenes provocando su muerte y una
proporción elevada de la fruta queda afectada. Su control se realiza agitando
los árboles en invierno, recogiendo los chinches e introduciéndolos en
queroseno. Destacan otros chinches como Banasa lenticularis.
8.1.3. Otras plagas
defoliadoras.
La oruga
de Schizura ipomeae come las hojas del árbol pero es parasitada por la
mosca Thorocera floridensis. El follaje a veces se infesta con colonias de
araña roja (Paratetranychus hawaiiensis). El áfido de los cítricos (Toxoptera
aurantii) es otra de las plagas que afectan al litchi.
También
destacan los barrenillos o taladradores de las ramitas Hypermallusvillosus
y Proteoteras implicata. Las larvas del escarabajo Exema nodulosa
y de la polilla Acroceropsse cramerella son otras plagas que afectan al
litchi.
El áfido (Aphis
spiraecola) ataca a plantas jóvenes en zonas sombradas. Los nematodos
parásitos Hemicriconemoides mangiferae y Xiphinema brevicolle causan
la muerte y el declive de numerosos huertos de litchi. El nematodo de las
agallas de la raíz nudo, Meloidogyne javanica, también ocasiona
daños pero es menos prevaleciente.
8.2.
Plagas que causan daños al fruto.
El
chinche verde del sur, Nezara viridula, y la larva del barrenillo del
algodón Strymon metinus son las más destacadas. Los lepidópteros Cryptophlebia ombrodelta y Lobesia sp. pueden causar la caída de la fruta. La
mosca de la fruta, Ceratites capitata hace agujeros diminutos en la piel
de los frutos disminuyendo su valor comercial.
Los pájaros, ardillas, ratas y abejas dañan las frutas maduras lo que obliga a
los agricultores a emplear espantapájaros y otros utensilios que los aparten
del cultivo.
Los
hongos Cephaleuros virescens, Gleosporium sp. y Phomopsis sp.
provocan manchas y el bronceado de las hojas del litchi. Clitocybe tabescens
causa la putrefacción de la raíz y generalmente ataca a los árboles de litchi
plantados en antiguas plantaciones de roble. Se sabe que este hongo se refugia
en los pies viejos de roble de donde se propaga a las raíces del litchi.
También
destacan las manchas foliares provocadas por Pestalotia pauciseta
y puede ser controlada a través de pulverizaciones de cal y azufre. Los líquenes
y algas normalmente crecen en los troncos y ramas de los árboles litchi.
En
la poscosecha si las frutas están en ambientes calurosos y húmedos se favorece
el crecimiento de levaduras. Es importante guardar las frutas en lugares frescos
y secos, con una buena circulación de aire.
Los frutos maduros tienen
un agradable sabor ligeramente subácido. El
litchi se consume generalmente como fruto fresco en ensaladas de fruta y postres
de macedonia. También se emplea en la fabricación de dulces, sorbetes,
helados, refrescos, etc. En pequeñas cantidades se condimentan con especias o se encurten,
se realizan salsas, confituras o vino.
Es común la producción
de frutos secos y enlatados de litchi. Las nueces de litchi se preparan
secando los frutos. La pulpa se encoge desde la concha exterior formando una
delgada capa alrededor de la semilla y tiene sabor a nuez, dulce y parecido a
la uva pasa. En China es muy apreciada
la miel obtenida de flores de litchi.
El
litchi también se emplea en medicina. Ingerido en cantidades moderadas,
elimina la tos y tiene un efecto beneficioso en los problemas glandulares y de
tumores. Las semillas tienen acción analgésica. Las flores alivian dolores
de garganta.