5.2 PATRONES
Se utilizan tres patrones: franco, D.Lotus y D. Virginiana que confieren cierta resistencia al frío.
D. Lotus es tolerante a la sequía y suelos calizos, aunque la unión con la variedad no es totalmente perfecta, de forma que induce un aumento de la precocidad y una disminución del tamaño y de la longevidad.
D. Virginiana tolera los suelos encharcadizos y confiere un mayor porte.
En España el más extendido es D.Lotus.
6.1 DISEÑO DE LA PLANTACIÓN
Los marcos de plantación varían según la formación que se le de árbol, pero siempre favoreciendo la iluminación
Será 3x5 en palmeta, 5x6 ó 6x6 en vaso o pirámide.
6.2 ABONADO
Demanda bastante materia orgánica, por lo que es conveniente realizar un abonado de fondo con 60-80T/Ha de materia orgánica, aportando también aproximadamente 150 unidades de potasio y fósforo, 80 de calcio y 40 de magnesio.
Anualmente se suelen aportar 50 unidades de fósforo, 70 de potasio y 80-100 de nitrógeno, este último en forma amoniacal y repartido en dos pases, aplicando 2/3 en primavera para el cuaje y 1/3 en verano durante el engorde del fruto.
Sufre frecuentemente de clorosis férrica, por lo que habrá que evitar los suelos calizos (no existen patrones menos susceptibles) y aportar quelatos de hierro. También sufre con el déficit de magnesio.
6.3 RIEGO
Se puede cultivar como planta de secano fresco, pero si las precipitaciones no son suficientes necesita riegos ligeros y continuos de apoyo que se darán cada tres semanas durante el verano.
La producción aumenta en regadío y es preferible el riego localizado con riegos más frecuentes y ligeros, debido al sistema
radicular superficial (aunque con patrón de D. Virginiana explora hasta 20m).
6.4 MALAS HIERBAS
Sufre con el laboreo debido a la superficialidad de las raíces, por tanto es preferible el "no laboreo" o el laboreo en calle, dejando sin labrar la inmediación del tronco y eliminando las malas hierbas con herbicidas.
6.5 PODA
Se prefiere la formación en vaso debido a su analogía con el duraznero, aunque es más adecuada su formación en pirámide de varios pisos, ya que se adapta mejor a su hábito de crecimiento juvenil (dominancia apical). También se puede realizar la formación en palmeta, aumentando la producción con respecto a los dos sistemas anteriores, pues permite mayores densidades de plantación y se adapta muy bien a las formas planas (no ramifica mucho).
Las podas serán bastante ligeras: se limitan la longitud de las ramas, para reducir la carga y para evitar roturas una práctica habitual es el apuntalamiento de las ramas fructíferas.
Cuando la carga de frutos es excesiva el árbol realiza un aclareo natural al alcanzar el fruto un tamaño considerable, aunque se puede forzar un aclareo, cuanto más precoz mejor siempre que no haya riesgo de heladas.
6.6 RECOLECCIÓN
La astringencia del fruto se debe a la presencia de taninos en la pulpa, que son eliminados mediante su polimerización con etanol o acetaldehído desprendido por las semillas una vez que el fruto ha madurado.
Tras la recolección la astringencia puede eliminarse por varios métodos artificiales: exposición a vapores alcoholicos (sake, whiskey o aguardiente) o a acatileno, etileno o ethephon o tratamiento en almacen durante 24 horas a 20-25ºC en atmósfera al 95% de CO2 .