La
batata generalmente se cultiva al aire libre. Tras la eliminación del rastrojo
del cultivo precedente mediante labor de vertedera y grada, y previa la
incorporación de abonos e insecticidas del suelo, el terreno se dispone en
lomos o caballones. Es necesario dejar el terreno perfectamente mullido para
facilitar la vegetación de la planta y el engrosamiento de los tubérculos.
Normalmente
se trata de caballones triangulares de 90 cm de ancho por 35 cm de altura y
una distancia entre líneas de 95 cm. Cuando los caballones están preparados
se realiza un pequeño hoyo en su cima.
a)
Época de plantación. Según la zona de cultivo, pueden variar las
épocas, pero en general se realiza durante los meses de abril y junio. En los
climas más cálidos puede escogerse cualquier época, siempre durante la
estación seca, aportando riegos abundantes.
b)
Marco de plantación. La distancia entre líneas es normalmente de 95
cm. La separación de las plantas dentro de la línea oscila entre 30 y 40 cm,
lo que supone una densidad que varía entre 35.000 a 26.300 plantas/ha. La
distancia entre plantas variará en función del vigor y de la precocidad de
la variedad a cultivar. A distancias mayores se obtienen tubérculos de mayor
tamaño.
c)
Plantación. Se realiza por medio del cuchareo para la plantación de
las puntas o esquejes (trozos de ramas de 30-35 cm y provistas de tres o
cuatro yemas por lo menos). Se emplea un mango de caña de unos 2,25 m, en
cuyo extremo se coloca un recipiente cilíndrico de hojalata. Con ayuda de
este instrumento se suministra agua al hoyo al mismo tiempo que se planta el
esqueje. Así se consigue que la parte enterrada en el hoyo embarrado quede
arqueada, lo que facilita el enraizamiento. El esqueje se plantará de forma
que entre dos o tres nudos queden enterrados y variará según el vigor de la
variedad elegida. Cuanto mayor sea el número de nudos bajo tierra, mayor es
el número de frutos (tubérculos), ya que éstos se originan de las raíces
que emiten las yemas situadas en cada nudo.
a)
Reposición de marras. Se realiza entre los 7-10 días desde la
plantación. Es recomendable cuando los fallos superan el 15%.
b)
Aporcado. A los 40-50 días de haber efectuado la plantación es
aconsejable realizar un aporcado que permita combatir las malas hierbas.
c)
Escardas. Se realiza durante las primeras fases del cultivo empleando
tratamientos con pantallas, dirigidos a las malas hierbas con dicuat, paracuat,
etc. También pueden emplearse en preplantación herbicidas como clortal,
naptalam, etc.
d)
Control del excesivo desarrollo aéreo. Mediante despuntes y supresión
del follaje de la parte superior, para evitar efectos negativos en la
tuberización.
Son
muchas las rotaciones que pueden establecerse al combinar el cultivo de la
batata, durante el verano, con las numerosas especies hortícolas que se
desarrollan durante los meses de invierno. La elección de una u otra
rotación, donde la batata entre una vez al año, una vez cada dos, cada tres
o más años, depende fundamentalmente de las condiciones económicas
(demanda, mano de obra, tamaño de la explotación , etc.). La alternativa
más empleada es que la batata siga en la rotación a la papa temprana y
preceda a la cebolla, tomate, etc. En muchos países tropicales la batata es
precedente del arroz.
Normalmente
se realiza un abonado antes de la plantación o se complementa con el
procedente del estercolado y abono mineral que recibe del cultivo precedente.
La batata es exigente en potasio, poco en nitrógeno y materias orgánicas
nitrogenadas y discreta en cuanto al fósforo.
Se
recomiendan equilibrios 1:2:3 en dosis de 270 Kg de elementos fertilizantes
por hectárea. Esto corresponde a 500 Kg/ha de complejo 9-18-27 ó a la siguiente formulación con abonos simples:
La
batata precisa de suelos húmedos, sobre todo cuando se realiza la plantación
de los esquejes o puntas, para favorecer el enraizamiento, en las primeras
fases del cultivo, y en general a los largo de todo el ciclo. Una humedad
excesiva puede provocar pérdidas de producción cuantitativas y cualitativas.
Es boniato es una planta moderadamente tolerante a la sequía, a pesar de lo
caula responde productivamente al riego.
Respecto
al número de riegos serán suficientes tres o cuatro en los cuatro o cinco
meses que dura el cultivo, pero si el clima o la estación fuese muy seco se
darán hasta ocho o nueve riegos aplicados cada quince días. Los riegos se
realizan por superficie, inundando los surcos en los que se ha dividido la
parcela.
8.1.
Gusano de alambre o doradilla (Agriotes lineatus).
Las
larvas de este escarabajo excavan galerías y perforaciones en los
tubérculos, disminuyendo de forma apreciable el valor comercial de estos. Su
control se realiza de forma preventiva, durante la preparación del terreno y
antes de establecer el cultivo, con insecticidas en preparados granulados para
esparcir sobre el suelo y envolver con las labores. Las materias activas más
empleadas son lindano, paratión, carbofurano, clorpirifos, diazinón, fonofos
y foxim.
8.2.
Rosquilla negra (Spodoptera litoralis).
Las
larvas de este lepidóptero noctuido trepan por la noche a la parte alta de la
planta y devoran las hojas. Los daños se producen hacia el final del cultivo,
principalmente de focos situados en bordes y ribazos. Para su control se
aconsejan tratamientos en forma de cebos al final del día. Se emplean unos
100 kg de cebo por hectárea, normalmente en dos tratamientos, uno en julio y
otro en agosto. También se pueden emplear pulverizaciones de clorpirifos,
triclorfón, retraclorvinfos, cipermetrina, deltametrina, etc.
A
la batata le afectan las siguientes virosis principalmente:
Mosaico
de la batata. Produce enanismo, mosaico y deformaciones en hojas y escasa
o nula tuberización.
Virosis
del acortamiento interno de la batata (Internal Cork). Produce
deformaciones tisulares acorchadas en el interior del tubérculo, junto
con manchas cloróticas en hojas, venación verde clara, etc.
Moteado
complejo de la batata. Produce enanismo, amarilleamiento de las
nerviaciones de las hojas jóvenes, manchas amarillas en hojas viejas,
entrenudos y tubérculos pequeños. Es transmitido por aleuródidos como
la mosca blanca del tabaco Bemisia tabaci.
Sweet
Potato Vein Mosaic Virus (SPVMV). Produce hojas abullonadas, rizadas,
moteadas, etc. las plantas afectadas crecen débilmente y las hojas se
desarrollan poco y quedan pequeñas.
9.2.
Fusarium oxysporum.
Enfermedad
vascular que produce amarilleamiento progresivo de hojas y posteriormente
desarrolla una podredumbre negra en las raíces. Debe prevenirse con
desinfecciones del suelo, distanciamiento de las alternativas, etc.
9.3.
Momificado de la batata.
Provocada
por el hongo Monilichaetes infuscans, produce manchas irregulares de
color rojizo y en ocasiones agrietamientos de la corteza. Cuando aparece en el
almacén, produce desecación y momificación de los tubérculos. Debe
combatirse mediante tratamientos con TBZ, benomilo, etc., desinfectando el
material de multiplicación y utilizando variedades resistentes.
9.4.
Blackrot de la batata.
Anomalía
propia de viveros y de almacén causada por el hongo Cerastomella fimbriata,
que produce pequeñas manchas de color marrón oscuro. deben utilizarse
variedades resistentes, desinfectar los tubérculos utilizados para la
multiplicación, etc.
Cinco
o seis meses después de la plantación se puede empezar a recolectar las
batatas, normalmente durante los meses de octubre y noviembre. Unos quince
días antes es preciso realizar una labor de corte de las ramas. Cuando la
batata está madura, las hojas adquieren un color amarilleamiento. La
recolección es manual dejando que las raíces se sequen sobre el terreno,
aunque en grandes superficies es común la recolección mecanizada.
Los
rendimientos medios varían entre las 20 y 30 Tm/ha y una producción media
por pie de 2 a 4 tubérculos con un peso que oscila entre los 200-400 gramos
cada uno.
Para
la conservación de las batatas se disponen los tubérculos en capas dentro de
un local ventilado a 11-15º C y una humedad del 80-85%. La conservación a
temperaturas inferiores a 12º C puede producir arrugamiento de las raíces,
enmarronecimiento de la carne, huecos superficiales de pequeño tamaño y
ataques criptogámicos secundarios.