1.Generalidades.
La alfalfa es por excelencia el cultivo forrajero en
España. Está presente en casi la totalidad de la geografía española, pero
fundamentalmente en las tierras calizas de la cuenca del Ebro, donde se hacen
el 50% de las siembras. Aproximadamente el 25% de la superficie cultivada se
dedica a secano y el resto a regadío.
2.Características
botánicas.
Esta forrajera (Medicago
sativa) pertenece a la familia de las leguminosas, es una planta perenne,
con una raíz pivotante principal muy desarrollada y muchas raíces
secundarias.
Al tener un gran sistema radicular (de hasta 5 m de
longitud), resiste mucho la sequía pues las raíces tienen un gran campo de
acción. Por lo que habrá que utilizar suelos profundos en este cultivo.
Es una planta muy adecuada
para la siega al poseer tallo erectos y consistentes.
Las primeras hojas verdaderas
son unifoliadas, aunque las normales son trifoliadas y pecioladas. Los
foliolos se presentan en formas más o menos oblongas y anchas.
Las flores, que se presentan
en racimos axilares, son grandes (8-10 mm), con la corola violácea o azul.
En la alfalfa común (Medicago
sativa) el fruto es indehiscente. Cada legumbre alberga semillas arriñonadas
de 1,5 a 2,5 mm de longitud.
3.Exigencias del
cultivo.
La temperatura con la que
germina la semilla es de 2 a 3 ºC. Cuanto más alta sea esta temperatura,
antes germinará la semilla, estando su óptimo en 28-30 ºC.
Esta planta es muy resistente
al frío, soportando temperaturas de hasta -15 ºC. También es planta
resistente a la sequía aunque necesita grandes cantidades de agua para formar
la materia seca (800 litros de agua para 1 kg de materia seca).
Si queremos que este cultivo
sea aún más resistente a la sequía tendremos que hacer aportaciones
importantes de potasio.
En el invierno, tolera los
encharcamientos de agua durante 2 ó 3 días, no así en el período de
crecimiento vegetativo. Si el encharcamiento se prolongase las raíces morirían
por asfixia radicular.
El suelo no debe tener una
acidez elevada. Si el pH estuviese por debajo de 6 habría que encalar los
suelos cada dos años.
Los efectos de esta cal son
muy beneficiosos para la alfalfa pues : elevan el pH, aumentan el contenido de
ión cal y frena la absorción de aluminio y manganeso (perjudiciales para la
planta).
El óptimo de pH sería 7,5
para este cultivo.
Cuando la planta es pequeña
es bastante sensible a la salinidad, tanto del agua como del suelo; esto no
ocurre cuando la planta tiene mayor porte.
Los suelos con menos de 60 cm
de profundidad no son aconsejables para la alfalfa.
4.Abonado.
En cualquier caso es
conveniente estercolar el suelo antes de la implantación del cultivo.
Aparte de esto, es
recomendable echar unos 100 kg de P2O5 y 150 kg de K2O.
Las aportaciones de nitrógeno deben ser moderadas, del
orden de 25-30 kg por ha. También se ha comprobado que hay un aumento de la
producción con aportaciones de Boro y Molibdeno.
En la alfalfa de secano los
abonados se han reducido al mínimo y actualmente lo único que se echa es
superfosfato antes de la siembra.
5.Herbicidas.
Los herbicidas más
recomendados en este cultivo son los siguientes:
Asulam:
es específico contra rumex y helechos. Aplicación es postemergencia del
cultivo.
Benfluralina:
este herbicida necesita incorporarse al suelo y esto se hace en presiembra.
Dicuat:
se aplica después del segundo corte y posteriores.
Diurón:
se aplica durante la parada invernal y en preemergencia de las malas hierbas.
Paracual
+ Diurón: se aplica en presiembra o postemergencia de cultivos con más de 3años.
Simazina:
se aplica en preemergencia de las malas hierbas; en cultivos de más de un año
y durante la parada invernal.
El parásito más temido por
la alfalfa sin lugar a dudas es la cuscuta (Cuscuta epithymum),
que es una fanerógama. Carece de hojas, clorofila y raíces, por lo que
extrae la savia elaborada de la cuscuta mediante unos chupadores hasta que la
asfixian.
El mejor tratamiento para la
cuscuta es aplicar DCPA, Dibutalina o Propyzamida.
6.Plagas de la
alfalfa.
Cuca (Colaspidema
atrum): es un coleóptero de la familia de los Crisomélidos que causa
estragos en este cultivo. Contra la cuca se pueden aplicar alguno de los
siguientes productos: Alfacipermetrín, Malathión, Cipermetrín, Fosalone,
etc.
Gusano
verde (Phytonomus variabilis): es un coleóptero de la familia de
los Cucurliónidos que no sólo ataca a la alfalfa sino a mucho otros cultivos
forrajeros. Contra esta plaga se puede aplicar en el tratamiento: Tau
fluvalinato, Deltametrín, Carbaril, Cipermetrín, Malathión, Foxim...
Palomillas
o polillas (Loxostege sticticalis y Dichomeris lotellus):
son lepidópteros que causan graves daños al cultivo. Antes de hacer el
tratamiento con Foxim 3% hay que hacer una siega a la alfalfa.
Otras plagas que también afectan a la alfalfa pero con menor
incidencia son:
Rosquilla negra (Spodoptera littoralis)
Gardama (Laphygma exigua)
Gusanos grises (Agrotis segetum)
7.Enfermedades
de la alfalfa.
Mal vinoso de la alfalfa
(Rhizoctonia violacea): la variedad medicaginis es la que más afecta a la
alfalfa y sobre todo en el norte de España. Tratar con pentacloronitrobenceno
al 20% (PCNB).
Roya (Uromyces striatus):
sobre todo ataca en invierno que es cuando hay más humedad en el ambiente. No
se conocen tratamientos efectivos contra esta enfermedad.
Viruela de la hoja (Pseudopeziza
medicaginis): los ataques de este hongo también se producen en ambientes húmedos
y frescos y tampoco se conocen medios para acabar con la enfermedad.
Mildiu
(Peronospora trifoliorum): origina enanismo en la planta al
acortar los entrenudos de la misma. Es una enfermedad poco corriente en la
alfalfa en España